1928 - Dulce afrutado

Cultura 30 de octubre de 2023 RICARDO ALBERTO PÉREZ GONZÁLEZ

web dulce

¿En qué momento me crucé con tu mirada? Que a través de los vidrios, muros, cualquier barrera en sí, atravesó las heridas, cauterizando e incitando al bello olvido.

Se hace tarde. Divago. ¡Sí que divago!

Mientras acomodas tu mirada, me enfocas.

¡En definitiva eres más hermosa que los tulipanes que vi en un sueño apacible!

Ahora que recuerdo, por la mañana me preguntaba por la suerte que cargaba bajo el brazo. Pues bueno, ya no tiene sentido.

Decido tomarte de la mano, caminar por un sendero lleno de sombrillas pasteles. Luego, de a poco, nos adentramos en un santuario. Unas copas de vino afrutado aguardan ser consumidas por nuestros labios que ya se besan. Se besan lindo y acalorados por nuestras esencias que transitan de piel a piel, acarician cada bordo, cada cicatriz, cada grieta.

¡No sé qué me pasa contigo! Es la primera vez que te miro. Apenas te conozco y mis labios ya son tuyos. 

No sé qué vaya a pasar. Te miro a los ojos, beso tu cuello, beso tus hombros, la clavícula también pero más suave, más lento. Me detengo, sonríes y sonrío...

Un bao gigantesco surca los techos.

¿En qué momento me crucé con tu alma?

Te puede interesar

Espacio Libre México

Lo más visto

Suscríbete al newsletter para recibir periódicamente las novedades en tu email