La 4T: Su propia oposición

La 4T tiene una base social que ya quisiera cualquier líder en el mundo, muestras de ello son la avasalladora victoria del hoy Presidente y las más de 20 gubernaturas conseguidas en tiempo récord, pero el apoyo no es gratuito, se da gracias a un programa de gobierno que tiene como principal objetivo redistribuir con mayor justicia la riqueza generada por todos los mexicanos, además de contar con obras emblemáticas que están ahí a la vista de todos, como son el Aeropuerto Internacional «Felipe Ángeles» (AIFA), el Tren Maya, la Refinería Olmeca, el Tren Transístmico, etcétera.

Todas estas obras no son ocurrencias, como suelen calificarlas los opositores al Presidente; el pueblo votó por ese programa y, al ver que se ejecutan en tiempo y forma, sin sobrecostos y sin corrupción, la gente refrenda su voto de 2018.

Los adversarios de AMLO carecen de base social que les respalde, y según parece no la necesitan, pues cuentan con el apoyo de la élite económica, los medios tradicionales y la anuencia de Washington. Por eso no es sorpresa que la asociación Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad, de Claudio X. González, brazo ‘social’ del PRIAN, además de recibir recursos del alto empresariado mexicano, reciba también millones de dólares del gobierno norteamericano, mismos que se utilizaron para oponerse a las obras emblema de la Cuarta Transformación, con múltiples amparos presentados en el Poder Judicial que interrumpieron los trabajos y entorpecieron la acción del gobierno, sin que esto impidiera en última instancia la oportuna entrega de las mismas por parte del Ejecutivo federal.

Es por eso que las conferencias mañaneras se convirtieron en un ejercicio indispensable contra las noticias falsas, la calumnia y el golpeteo mediático que sufren el Presidente y la coalición que lo respalda.

La oposición más fuerte al cambio planteado en 2018 vive dentro del movimiento, con la ya conocida tendencia al chantaje del senador Ricardo Monreal Ávila, los señalamientos de inexistencia de piso parejo por parte del canciller Marcelo Ebrard Casaubón, y los expuestos también por el diputado federal Gerardo Fernández Noroña. Las reglas de la carrera presidencial deben marcarse muy bien para que no queden dudas que pudieran sustentar una ruptura del movimiento o de la coalición.

Por los motivos antes expuestos, el movimiento social que llevó al poder a Andrés Manuel López Obrador debe responder al llamado a la unidad encausado por el Presidente de la República, ya que lo mejor que le podría pasar a la oposición en 2024 es un movimiento social fracturado por la lucha interna, que permitiría el regreso de la derecha más rancia y radical que sigue rehusándose a perder sus privilegios. / ESPACIO LIBRE