¿Vendepatria?

No encajonas, no encartonas, ¿sílaba tónica?, al parecer me fui y todo conmigo también, al parecer el ahorcado no importa si en la casa hay visitas, que paguen lo suficiente para aparentar ser feliz, ahora todos los que defienden el estado no son más que suficiente cartón que baila por bailar.

Pero, ¿hablo de quién me vendió? O, ¿solo estoy enojado por qué no me preguntaron con anticipación? “Nah que va”, mejor me quedo con mi lugar, ellos muy seguramente han de pensar -ni cuenta se han de dar- pero que equivocados están, si su vende piso se cubrió y lo peor es que lo negaron y asintieron sin más.

Me acusan de marginal, pero ellos sin parpadear se atreven a marginar y acusar de agresivos con los de otro lado por defender lo que por Constitución es de nosotros y nadie más, vaya que ironía, me hacen renunciar a un espacio, al que me apegué y encima de todo me crié, lo vi crecer y me vio a mí él también a mí.

Me pueden acusar de dar vida a un pobre lugar, pero me importan más que un simple billete que se atreve a sancionar a los demás, incluso no solo eso sino también mandar y a su vez acusarnos a nosotros de agresivos y bestias, -uyy que miedo me dan, compórtense y trátenlos bien, no se nos vayan a ofender y ya no nos vayan “pelar”- decía mientras se regocijaba en su casonon y se reía de nosotros como si por sus acciones nosotros tuviéramos que pagar, pero que más da, si en la mañana siguiente él seguirá sin consecuencias y sin accionar, nosotros preocupados, desilusionados y aparte hasta regañados y él llevándose un gran tajo de lo que les cobró y a nosotros nos arrebató.