Que Villegas actúe vs. Aispuro

Un magnífico regalo anuncia el gobernador Esteban Villareal Villegas, entre pompa y circunstancia, entre selfies y chayotes, para celebrar el aniversario 460 de la fundición de nuestra muy noble, antes callada, antes tranquila y antes colonial, ciudad Victoria de Durango.

Anuncia nuestro maravilloso, sensible, chulo, Gobernador Villegas que como “regalote” de cumpleaños de la ciudad, se invertirá la enorme cantidad de 190 millones de pesos en obras de infraestructura, callecitas, alumbrado, selfies, siembra de chayotes, curitas para los raspones, agua de Jamaica. Es genial. Eres grande Villegas.

Es una inversión nunca vista. Bendito San Jorge que nos puso a esta maravilla de hombre. Solo que hay un pequeño detalle, un detallito diminuto.

Ese mismito discurso, demagogia pura y priísta, palabras menos, palabras más. Esa clase de inversiones, de promesas de un gran futuro, de un gran progreso, lo venimos escuchando de cada uno de los gobernadores que hemos tenido en los últimos dieciocho años. Gobernadores que entre los tres nos han saqueado con casi 50 mil millones de pesos.

Desde el “campesino” Hernández Deras, padrino político de Villegas Villareal, luego Jorge, el sonrisitas, Jorge el bello, también discurseó sus demagogias financieras, anunciaban millones de millones de inversión en Durango, de todo tipo, infraestructura, carreteras, caminos, aeropuertos, submarinos atómicos. Y no se diga de José Rosas Aispurio, que prometió hasta la sangre de Cristo, la resurrección de los muertos. Y salió bien uña larga.

Total, que en Durango seguimos igual de jodidos pese a esas millonarias inversiones. Y más con el desfalco del panista Aispurio, que suma 25 mil millones de pesos.

Pese a esos millones dizque invertidos cada sexenio, tenemos las mismas calles tachonadas de baches. Tenemos un pésimo sistema de drenajes pluvial que en cada lluviecita, San Tláloc bendito, acabamos con el agua hasta el cuello. Seguimos hambreados y mal pagados. Y las inversiones en caminos, pos dónde, cuándo. Hay caminos, carreteras, como la de Los Herrera que llevan veinte años construyéndola. Y la súper autopista a Mazatlán un fraude. De inversión industrial cero inversiones. Cero crecimientos. Excepto en deudas y quebrantos financieros.

Las únicas inversiones que han florecido en Durango, son los negocios de los exgobernadores. Edificios de varios pisos, centros comerciales, hoteles, restaurantes, franquicias, nomás dense una vuelta por el bulevar Domingo Arrieta, plagado de centros comerciales, halls, modernos y grandes, quesque dicen las malas lenguas, son del Ismael y del Jorge. Y si visitan Mazaras, ahí en la isla, un hotel a puro lujo, propiedad del Isma.

De Aispurito también se saben sus transas y propiedades, pero no se dice nada, está protegido por la mano santa del gobernador Villegas.

El mejor regalo que podrá recibir Durango por sus 460 años de existencia, no son las inversiones señor gobernador. No son los “regalos” de los uniformes escolares que tanto ha cacareado. Señor gobernador, el mejor regalo de cumpleaños para una ciudad tan destruida como la nuestra, para un Durango tan saqueado, un Durango empobrecido, sería que usted, señor gobernador Villegas, se dejara de fotitos y chayotes a la prensa.

El mero regalo por el 460 aniversario de Durango es que usted señor gobernador Esteban Villegas, ejerciera en su gobierno, aplicando la ley y el Estado de Derecho, aplicando la  Constitución de nuestro estado y la federal,  que usted juró defender y hace respetar y llevar a juicio penal al exgobernador José Rosas Aispurio, su antecesor, un  juicio penal por el desfalco de 24 mil millones de pesos que nos dejó en la jodida bancarrota, en andar mendigando recursos federales y endeudando al erario. Meter a la cárcel y recuperar los 24 mil millones, ese sí sería un regalo digno de los 460 años que ha cumplido Durango.

El mejor regalo por los 460 años de aniversario de Durango sería que usted gobernador Villegas le hiciera justicia a las 40 muertes por meningitis, la mayoría mujeres, madres duranguenses, y encarcelara a los autores intelectuales de estos feminicidios (Aispurito, su protegido, y el ex secretario de Salud).

Ese sí sería un verdadero regalo por nuestro 460 señor gobernador, para nuestro maltratado y jodido Estado.