Enorme soberbia e ignorancia de los que marchan ‘para defender el voto’; es para defender privilegios

La marcha para defender el voto del domingo 26 de febrero. Marcha para defenderlo, ¿defenderlo de qué o contra qué? Una marcha que reunió cien o quinientos mil, no importa la cifra, no importa si eran acarreados. No les importó ver la cara de Genaro García Luna, el narco del PAN, el socio del asesino genocida de Calderón, marcharon tomados de las manos ensangrentadas de los panistas.

Marcharon para apoyo a los Markos Cortez, con todo y partido de acción narcotil. Con los alitos y demás mierdas de políticos corruptos, manejados y controlados por Claudio X González, quien busca recuperar sus negocios y privilegios, no pagar impuestos, recibir becas de treinta millones.

Esa gente marchó por ‘defender su voto’, evidenció su ignorancia asnal. Una ignorancia que da miedo. Gente gritando que les quieren quitar su credencial de votar y la van a defender con la vida. Gente que marchaba porque no quiere que los conviertan en ateos (¿?). Al preguntarles si saben qué es la Reforma B electoral, declaraban orgullosamente que no lo habían leído, pero sabían que era malo. 

Ese México clasista, de racismo blanco en un país mayormente mestizo. Cuántos de esos mexicanos van a votar por una enloquecida psicópata Lilly Téllez, por un Colosio junior, cuyo único mérito es ser hijo de un muy sobrevalorado Donaldo Colosio, priista asesinado por priistas. El hijo liderando a los asesinos de su padre. Votarán por un psicópata cobarde como Ricardo Canallín Anaya. O por alguno de los viejos dinosaurios. 

Ese medio millón de mexicanos, de rosa INE, debieron ir vestidos de rojo, de rojo sangre, por apoyar a narco-partidos que mataron a miles de mexicanos, que convirtieron la guerra de Calderón en guerra de un solo cártel, el del Pacífico, en una guerra usando las fuerzas del Ejército y de la Policía Federal. Van a apoyar el corrupto gobierno de Peña Nieto, extrañan ser sobajados y robados.  Ni cómo ayudar a esos mexicanos, ciegos y racistas, ciegos y clasistas. 

En la próxima marcha de López Obrador veremos el verdadero músculo del pueblo mexicano. Somos más de cincuenta millones que apoyamos al movimiento de Morena, principalmente a López Obrador. 

En julio se verá qué tanto es de cierto esta marcha. En abril se largan Lorenzo Córdova, cobrando un finiquito de 9 millones de pesos, aunados a los más de veinte millones de pesos de sueldo en sus quince años de corrupciones electorales. Los quinientos mil acarreados, clasistas, marcharon a defender esos privilegios, enarbolando como bandera su enorme soberbia e ignorancia.