La derecha del PRIAN te desprecia, pero te necesita

Las acciones erráticas e improvisadas de la oposición de derecha en México pueden resumirse en una palabra: desesperación. No cabe duda que han sido incapaces de crear una opción real de renovación de sus propuestas porque carecen de ideas nuevas, se han negado a la autocrítica, tienen una venda en los ojos que les impide ver que -si bien Andrés Manuel López Obrador y su movimiento los borraron en gran medida del mapa electoral- fue el degaste de su modelo y la falta de resultados del mismo los que los tiene en la lona.

Creen con un dogmatismo exacerbado que sus métodos de gobierno son una maravilla, viven en la necedad de hacer lo mismo que hicieron las últimas cuatro décadas, aun y cuando sumieron al país en una terrible crisis constante, una desigualdad ofensiva y una violencia desmedida; juraron combatir la pobreza, pero la fomentaron, se comprometieron a cumplir y hacer cumplir la ley, pero fueron sus principales violadores, prometieron gobernar para todos, pero lo hicieron para los más ricos.

Para la derecha lo importante no son las propuestas, le apuestan a la estridencia, a la crítica infundada, a la falsa pero ruidosa afirmación de que el país se “cae a pedazos”, distinto de lo que la gente vive en su realidad, sobre todo los más pobres, que gracias a las políticas públicas redistributivas del gobierno de AMLO pueden acceder a un piso mínimo de bienestar, inaudito en el México moderno.

Tan perdidos están, que lejos de intentar congraciarse con el pueblo al que ofendieron y empobrecieron, lo ven con deprecio por elegir la opción progresista en 2018, se les olvida que esos a quienes llaman huevones, maleducados y nacos, también votan y ven en la Cuarta Transformación una esperanza de que las cosas sigan mejorando.

¿Qué van a proponer que no se haya visto antes? ¿Cómo van a gobernar diferente, si son los mismos que entregaron todo lo que pudieron a los privados nacionales y extranjeros? ¿A qué intereses van a beneficiar si llegan al gobierno otra vez, si hoy siguen las instrucciones del empresario disfrazado de sociedad civil, Claudio X. González?

Tuvieron ya, buenos años para reinventarse, analizar lo que hicieron mal y crear una alternativa novedosa al gobierno de la 4T, pero eligieron oponerse a todo lo que representa Andrés Manuel, reivindican así su favoritismo por los poderosos, los privilegiados, los magnates, dando la espalda a las causas populares, ignorando por enésima vez los dolores del pueblo, que siguen siendo muchos y que este gobierno alivia todavía de forma insuficiente, aunque hay avances sustanciales.

El PRIANRD es el instrumento electoral de las élites, responde a sus intereses y hace lo que a ellas conviene, no encontrarán en 40 años de neoliberalismo en México una sola modificación a la Constitución o las leyes que haya sido en beneficio de las mayorías, fueron sólo políticas entreguistas, hambreadoras del pueblo y constructoras de una oligarquía que hoy quiere volver por lo que perdió en 2018.

Por eso es de vital importancia detectar a esos que disfrazados de sociedad civil quieren manipular a la sociedad, hay que evidenciarlos, porque encarnan a la derecha más rancia, autoritaria y servil a los poderosos, que necesitan tu voto, pero no para representarte a tí, es más, te desprecian y si no eres multimillonario, no trabajarán en tu beneficio, eso ya está muy visto.