La “bondad” de la pareja real que desgobierna en Durango

En una escena digna del melodrama mexicano al estilo de “nosotros los pobres” que arrancó lagrimones, abrazos, apapachos y ciento de selfies, la pareja real de Durango, una vez más mostró su gran corazón y benevolencia para con sus súbditos, que nos hizo recordar a la gran pareja que en su tiempo fueron la comidilla de la sociedad: Enrique Peña Nieto y su gaviota. Guardando las distancias, ambas parejas reales, mantienen el mismo protagonismo y manejo de imagen.

El gobernador Esteban Villegas Villarreal y su esposa Marisol Rosso, hicieron realidad el gran sueño de cuatro familias, cuatro de los miles de familias que en la ciudad, comparten un solo techo, quienes, formalizaron legalmente su unión, por medio del matrimonio civil.

Recibieron el “gran regalo de su vida”, lo que soñaron eternamente: dos pies de casa que les cambiarán su situación de hacinamiento por una mejor calidad de vida. Bravo, que nuestros gobernantes con su dinero propio, con los 200 mil pesos que gana Esteban y no con los impuestos de los duranguenses sino qué chiste tendría su generoso acto de bondad extrema, es como si hicieran caravana con sombrero ajeno. Bravo por hacer lo que marca su deber como gobernante. Para eso se le paga.

Nuestro Esteban, el amoroso y romántico cantante, en su campaña “Uniendo Corazones”, Marisol y Esteban aprovecharon para entregarles implementos médicos, un bastón y una andadera, pero al ver el hacinamiento en que vivían, Villegas Villarreal, al grito “soñar en grande” ordenó la donación de dos pies de casa, para ampliar sus hogares. ¿Y las otras familias?

Ojalá Esteban hiciera lo mismito con los cientos de familias duranguenses que viven arrecholados en sus pobres viviendas, en una pobreza extrema, sin esperanza ni futuro, que medio comen una sola vez al día, con hambre y frio, sin esperanza y sin futuro.

Y los “presumiera” en redes y medios, como lo hacen con estas cuatro familias. Más hechos, no tanta pinche propaganda chayotera. Si invirtiera el dinero que gasta en darse publicidad en construirles pies de casa, cientos de familias mejorarían su calidad de vida.

Sus promotores del chayote, anuncia a sobre amarillo de por medio, esa construcción de dos cuartos y un baño en cada uno, como un “esfuerzo extraordinario”, por parte del ejecutivo estatal y su esposa, con los dineros del gobierno. Si no gastara dinerales en sus viajes de turismo vacacional que hace con su primo y su comité de lángaros, un número mayor de familias serían beneficiadas y no de solamente cuatro familias. 

Sigue Esteban en sus sueños en grande, esperando el tan anunciado año de progreso para Durango que según esto ya empezó. 

Si alguien ha visto el progreso y la prosperidad, que según Villegas ya viene, por favor de indicarles por dónde se necesita. Y que no se vengan por la autopista de Mazatlán por peligro a ser asaltados y mucho menos por Zacatecas, ahí no solamente los robarán sino hasta pueden perder sus cabezas.

Gracias señor Gobernador por ese corazón tan vernáculo que diosito y San Jorge le dio. Este acto de bondad supera con creces, los siete millones que le dio a su primo Lauro Arce para el teleférico y sin pedirle la comprobación de gastos y obras. Total, todo queda en familia. ¡Ah que familia tan bonita!