Belleza

Todo depende de cómo mires. Observarás miles de bellezas en el mundo, genuinas, impresionantes, relativas y abstractas. Todas ellas captan la atención de aquel que no es merecedor de la misma; la belleza me notaba y yo la notaba a ella, existía en los innumerables patrones de vida que existían en mí, se entrelazaban entre hermosos días, se dejaba ver en los cautelosos momentos tristes y felices, la observaba junto a mí todas las mañanas.

Siempre existió, en todo y en cualquier momento. Existía en el ser que amaba el ser visto, existía en aquellas personas que amas, en aquellos animales que en ocasiones repugnabas y en otras cuantas amabas.

Debemos de vivir con belleza, disfrutar la vida a cada latido que te lo permita tu corazón, amarla y a veces simplemente no entenderla, fluir junto con su belleza y dejar que te transporte a donde te hará crecer, porque siempre te hará crecer.

Amar es belleza y belleza es vida, disfrutar es parte de la hermosa experiencia, no existe belleza en pensar qué pasará después, solo queda el momento más bello que es el hoy y es que se debe disfrutar aceptando lo incapaces y poco receptores de belleza y más cuando se trata de la vida.